¿Y SI HACEMOS PASTAS?

 

 

¿Facciamo la pasta? Que buena pregunta, amables lectores. Después de tantos días de calores extremos, de sudar la gota gorda, de sufrir los benditos cortes de luz de cada verano, un breve remanso de aire fresco y de lluvia, nos ha bendecido.

 

 

Y ya sea usted un vegetariano practicante, un vegano militante, un carnívoro desenfrenado o un omnívoro tradicionalista, ha sufrido por igual. Y estará repodrido de las frutas, las ensaladas, los asados, las picadas, la falta de apetito, la sed y hasta de las bebidas con hielo a toda hora.

 

 

Por lo tanto, y a consecuencia de ello la pregunta de nuestros abuelos y abuelas: ¿facciamo la pasta?, nunca ha sido más oportuna, que en este breve oasis de suaves calores. ¿Y por qué no? Si tanto pueden comerlas los vegetarianos como los carnívoros, los veganos como los omnívoros. Y a una buena pasta casera, no se le resiste nadie. Así que en esta nota, a pesar de encontrarnos transitando el corazón del verano más caluroso de los últimos años, igualmente nosotros apostamos por la pasta.

 

 

O acaso IL COMMISSARIO MONTALBANO, no hacía religiosamente la pausa al mediodía, para almorzar en pleno agosto siciliano, en su restaurante favorito Enzo a Mare, su pasta con broccoli.

 

 

Y no sé si usted, amable lector, ha estado en Sicilia en agosto, pero le aseguro que calor, hace muchísimo calor.

 

 

EL CALOR NO ES TEMA

 

Cuando los ingleses llegaron a la India en 1757, Robert Clive, al mando de las tropas de la Compañía de las Indias Orientales, ante la queja de su tropa por la molestia que les causaban sus uniformes, las típicas casacas rojas de lana tejida, decidió reunirlos. En un improvisado patio les hablo a todos: “caballeros, hemos venido aquí para quedarnos, a partir de hoy, el calor, no es tema.” Y se quedaron casi doscientos años.

¿A qué viene esta introducción? A tratar de desmontar uno de los tantos mitos que circulan acerca de qué debemos comer y cuándo debemos comerlo. Ya que según los opinólogos más reputados de los medios de comunicación, las pastas son una comida pesada que se “debe” comer en el invierno, cuando hace frío, sumamente calóricas y tremendamente engordantes.

 

 

¿En qué se basan? En su ignorancia y en la ignorancia de algunos médicos y algunos nutricionistas que no deberían haber obtenido sus licencias, en condiciones normales.

 

FACCIAMO LA PASTA, UN ACERVO CULTURAL

 

 

Las tradiciones gastronómicas no se instalan por accidentes. Se instalan por la eficacia que han demostrado a lo largo de miles de años para cumplir con una serie de principios básicos: alimentar a poblaciones enteras, preservar su salud, aumentar su longevidad, garantizar que la especie se reproduzca y generar bienestar y felicidad. Si estos lineamientos generales no se cumplen, no existe ninguna posibilidad que una tradición prospere.

 

 

El hecho que en el Levante español se consuma arroz y paella, en invierno y en verano, que en la península italiana se consumen pastas, en invierno y en verano, y que la dieta del mediterráneo haya demostrado su eficacia en cuánto estudio científico haya sido puesta a prueba, demuestra esta realidad.

 

 

Pero avancemos un poco más. Las pastas han demostrado ser un tipo de carbohidrato que produce energías que el organismo transforma en calorías disponibles en forma inmediata. Que son de mucho más fácil digestión que una gran cantidad de verduras que poseen demasiadas fibras y muchas frutas muy ricas en fructosa. Mejor ni hablar de las carnes animales, que requieren una serie de procesos mucho más complejos para su digestión.   Así que vayamos tachando lo de que no son saludables y que no son para comer en verano.

 

 ¿QUIÉN DIJO QUE SON PESADAS?

 

 

Mientras escribo esta nota, en Melbourne ya es de noche y Rafael Nadal acaba de ganar un maratónico partido en cinco sets. En Australia esta semana las temperaturas máximas están cercanas a los 43 º C y en el court central del Torneo de Grand Slam, rondaría los 50º C. ¿Qué creen que almorzó Nadal antes del partido? Un plato de pastas.

 

 

¿Qué creen que comieron Messi o Cristiano Ronaldo, antes de una final de la Champions League? Un plato de pastas. Y Mbappé, Benzema, Pogba y el resto de la selección de Francia, ¿qué imaginan que almorzaron antes de levantar la Copa del Mundo en Rusia 2018? Adivinaron, sendos platos de pastas.

 

Walter Kannemann se consagró con Gremio en el torneo Gaucho y SE COMIÓ UN PLATO DE FIDEOS DURANTE LOS FESTEJOS. "Estoy muy feliz, pero tengo hambre", tiró ??? pic.twitter.com/taOV5Bi7q3

— TyC Sports (@TyCSports) April 19, 2019

 

Tanto los médicos deportólogos como los especialistas en nutrición deportiva, elaboran dietas personalizadas para cada deportista. Pero coinciden en una sola cosa: antes de la  máxima competencia el mejor alimento, por lo liviano, por la energía que les suministra en forma inmediata y por la fácil digestión, es la Pasta.

Así que tachen también que las pastas son pesadas.

 

A VACIAR LAS HELADERAS

 

 

 

En todos estos días de calor, seguramente ustedes amables lectores, al igual que yo, han estado inapetentes. Así que cualquiera sea su preferencia alimenticia habrán acumulado algunas sobras sin comer de diversa índole en crudos y cocidos.

 

 

Me refiero a los siguientes alimentos: verduras crudas a punto de caramelo, es decir más para hacer dulce que para hacer ensalada, verduras cocidas, restos de carne asada a la parrilla, algún par de choricitos, cuadraditos de jamón y queso cortados de alguna picadita, media tarta de acelgas sin tocar. Y en el freezer otro tanto, con lo que debe estar más lleno que el trolebús a las 7.30 horas en temporada escolar.

 

 

Es hora de liberarse de todas esas cargas pesadas y darle un respiro a la heladera y al freezer para que puedan funcionar con soltura, y de paso evitar que fundan biela, y los obliguen a cambiar, vacaciones por heladera nueva.

 

FACCIAMO LA PASTA ENTONCES

 

 

Empecemos por lo que todos tenemos en común, la masa. Ovo lacto vegetarianos, carnívoros y omnívoros una receta. Vegetarianos y veganos otra. Les damos las dos. Y otra para los celíacos. Tres recetas tres.

 

LA CLÁSICA CON HUEVOS

 

 

PARA VEGETARIANOS Y VEGANOS SIN HUEVO

 

 

LA MASA PARA CELÍACOS

 

 

SE VA LA SEGUNDA

 

Ahora es hora de aprovechar las sobras. Y para eso está la creatividad que no tiene límites.

 

LOS CARNÍVOROS

 

 

Los carnívoros podrán hacer un sofrito de cebollas, pimientos y procesar las carnes del asado picadas previamente a mano, con los chorizos, en una procesadora, agregar un huevo, condimentar, agregar queso rallado y ya tienen un relleno para hacer panzottis, raviolis o capelletis. Una salsita de tomates , albahaca fresca y aceite de oliva y ya está.

 

LOS OMNÍVOROS

 

 

Y los omnívoros le pueden agregar a la mezcla anterior, el relleno de la tarta de acelga, teniendo cuidado de retirar toda la masa de la tarta y preparar canelones o una lasaña blanca o a la boloñesa. Hecha con la misma masa. Hervida en cuadrados previamente y colocados inmediatamente en una fuente con agua helada. Hasta colocar las capas en una asadera para horno.

 

FACCIAMO LA PASTA VEGGIE

 

 

Y para las distintas tribus que componen el creciente y cada vez más numeroso universo veggie, una selección de videos para inspirar su creatividad.

 

 

 

 

 

 

CONCLUSIONI

 

 

Solamente hace falta una cosa para hacer una buena pasta rellena: tiempo. Después de la salud es quizás lo más preciado que tenemos. Estamos llenos de todo pero siempre nos falta tiempo, ¿se dio cuenta, amable lector?

Una vez eso fue diferente, el tiempo estaba marcado por las estaciones, por los cultivos. No había nada comparado con lo que tenemos hoy, pero a la gente no le faltaba tiempo. Y con el tiempo disponible, la gente trabajó duro. Y a pesar de la escasez de alimentos, las hambrunas, las guerras, el hambre o la pobreza, lograron sacar pequeñas maravillas de la nada.

 

 

Así que para este verano, le deseo que encuentre tiempo para hacer lo que más le gusta, y por qué no, hasta un buen plato humeante de pasta rellena para sus seres queridos.

 

Emilio R. Moya

 

Fuentes: los enlaces están en el texto