¿DÓNDE NACIÓ LA FONDUE DE CHOCOLATE?
Buenos días estimados lectores. Según cuenta en su Facebook, el Chalet Suisse de Bariloche, un conocido restaurante y casa de té que ofrece comida suiza con un toque patagónico y es hogar de la olla de fondue más grande del país, la fondue de chocolate habría nacido en Nueva York.
Según esta leyenda, en 1966 un grupo de 100 periodistas fue invitado a un lunch en el Plaza Hotel de dicha ciudad.
Como primer plato, se sirvió una fondue de queso, como segundo plato, una fondue bourguignonne y de postre, una fondue de toblerone.
En pequeñas marmitas individuales de cerámica, burbujeaban barras del célebre chocolate, con miel y almendras fundido.
Para sumergir en el chocolate sirvieron tacos de pan, biscochos y frutas troceadas. Y al año siguiente, llegaría a Suiza.
Pero nosotros contamos historias y no leyendas, por lo que buscamos, como hace más de veinte años, el auxilio de Lynne Olver y su maravillosa Food Time Line que sigue iluminando al mundo, aunque ella ya no esté entre nosotros.
Y pudimos corroborar que son varios los que se adjudican el mérito de haber “inventado” la Fondue de Chocolate, pero solo uno de los postulantes, tiene las mejores credenciales.
A principios de la década de 1960, Konrad Elgi del restaurante Chalet Swiss de Nueva York notó que muchos de sus clientes, evitaban sus ricos postres de chocolate.
Consultó con su agente de relaciones públicas, Beverly Allen, y se les ocurrió una fondue de chocolate que fue presentada el 4 de julio de 1964, en la que se mojaban trozos de pastel y frutas: una variación completamente desconocida en Suiza (*)
(*)(Encyclopedia of American Food and Drink, John Mariani [Lebhar-Friedman: Nueva York] 1999, página 130)
Esta historia es corroborada en el Libro de postres de chocolate de Maida Heatter, que ofrece además, tres recetas de fondue de chocolate con productos de las marcas Toblerone, Hershey y Maillarid (*)
(*) (Libro de postres de chocolate de Maida Heatter, Maida Heatter [Alfred A. Knopf: Nueva York] 1978, páginas 369-371)
SIN PASAPORTE SUIZO
Así que la popular, aunque ahora bastante exclusiva, fondue de chocolate, no tiene su correspondiente pasaporte suizo como era de esperarse, ni tampoco pasaporte francés, sino que nació en los Estados Unidos.
Eso si no contamos, al chocolate con churros como un antecesor más que aceptable. ¿O acaso nunca sumergieron, amables lectores, un delicioso churro crujiente en una taza de espeso chocolate caliente?
Y es que sin el cacao de centro y sud América, llevado a Europa por los españoles, jamás los suizos o los franceses hubieran hecho sus célebres chocolates.
Ni hubieran emigrado de vuelta hacia las Américas, con las recetas para fabricarlos, con la precisión un de relojero suizo o la magia de un pintor francés con que lo hicieron.
Pero de estos ir y venir, está hecha la historia de la cocina. Y en menor o mayor medida, todos los platos surgen de intercambios entre tradiciones gastronómicas.
La exquisita fondue de chocolate no es una excepción a la regla, sino la plena confirmación. Ya que hoy ha retornado a Europa, y nadie se acuerda de Elgi, ni de Beverly Allen.
Y si hiciésemos una encuesta radial, preguntando ¿dónde nació la fondue de chocolate? podríamos conjeturar que arrojaría un Suiza 80 / Francia 20. Y los Estados Unidos no entrarían ni a placé.
CON QUÉ SE ACOMPAÑA UNA FONDUE DE CHOCOLATE
La variedad de alimentos que se llevan de maravillas con el chocolate, es amplia. Y hemos elegido mostrarlas, amables lectores, a través de imágenes, para despertar al mismo tiempo dos de sus pecados capitales: la gula y la ira.
Gula, porque seguramente van a tentarse y comenzar a sentir el deseo de hacer una fondue de chocolate. Ira, porque en cuánto vayan a preguntar, en el lugar del mundo en que estén el precio del chocolate, probablemente ese dato hará que nos odien.
En este caso han elegido fruta fresca, trocitos de bizcocho, pan y tortitas. Han querido darle un toque original, poniendo la fruta en brochetas y haciendo unas pancakes en su formato mini. Son pequeños detalles pensados, para mojar en el chocolate de la fondue fácilmente.
En este otro: frutillas, moras, peras, pretzels salados, malvaviscos y barquillos en forma de cubanitos.
Una versión humilde: bananas, kiwis, frutillas y galletitas de agua.
Con tutti y para todos los gustos: frutas frescas, cascaritas confitadas, rodajas confitadas, frutas secas, churros, masas finas, masas secas, brownies, cerezas, barritas de chocolate en trocitos, y además el agregado de cafés con leche y cortados medianos.
EL ÚNICO SECRETO ESTÁ EN EL CHOCOLATE
Usted puede elegir todos los toppings o acompañamientos que prefiera, pero si adentro de la fondue, no hay una buena preparación de chocolate fluido, caliente y delicioso, todos sus esfuerzos estarán condenados al fracaso.
Por eso es que le brindaremos algunos tutoriales para realizar esa labor, con diversas técnicas.
LA RECETA DE PRACTICOPEDIA, 10 AÑOS EN LA RED
LA RECETA DE ÁGUILA
LA RECETA DE MAPSA
LA RECETA DE CHOKOLAT PIMIENTA
LA RECETA DE GUILHERME GUZELA
LA RECETA DE ISAMARA AMÂNCIO
LA RECETA DE COCINEROS MEXICANOS
UNA ÚLTIMA OBSERVACIÓN
Estimados lectores: si después de todas estas opciones, no invitan a sus nietos a comer una. No preparan una para sus abuelos. No se inspiran para invitar a su familia, ni se les ocurre hablar con sus amigos para reunirse en torno a una fondue de chocolate, ustedes carecen de corazón.
Porque además, no es necesario que corran con todos los gastos, ya que los complementos, los pueden llevar los invitados.
En la redacción, lo más jóvenes esperan ansiosos, el llamado de sus amigos y de sus familiares. Los más veteranos, mucho más curtidos por los inviernos, mientras tanto evocamos las detalles de las fondues de chocolate, que compartimos en nuestra juventud.
Emilio R. Moya
Fuentes: citadas y enlazadas en la nota